"Siempre Vuelvo" (El Leo)

Vuelvo. Y ese es mi problema. Vuelvo a sucumbir. Vuelvo a los mismos pasillos blancos. Las mismas preguntas. La misma burocracia para atender mis dolores. Vuelvo a la caza de sanidad. Vuelvo al hospital para buscar respuestas y preguntas. Vuelvo a los pensamientos que no entiendo aùn. Vuelvo a exponerme al desorden en busca de orden. Vuelvo a buscar lo que me no pertenece. Me pertenece? Y aquì caigo otra vez, en lo mismo . . . osea, vuelvo. A dar o querer darle la culpa a alguien. Vuelvo a dar lugar a los egoìstas, a los jueces. Vuelvo a escuchar a los que no entendieron nada. Vuelvo a hacer cuentas con los años. Vuelvo a arriesgar màs de la cuenta. Vuelvo allì para poner en el abismo mi dèbil convicciòn. Vuelvo a hacerme una y otra vez las mismas preguntas. Vuelvo porque a veces tambièn mi piel seca necesita de esa miel. Vuelvo a la cima, pero despuès recapacito, pienso, y . . . vuelvo. Dònde? Atràs? Adelante? Ya no lo sè. Solo sè que estoy en el mismo lugar. Vuelvo a decir las mismas cosas. Por eso, vuelvo a callar. Vuelvo a querer coronar los corazones. Pero no quiero volver a condenar el mìo. Vuelvo al caos de mi mente. A la cùspide de lo que no alcancè. Vuelvo a pensar en el silencio, en el adiòs, en el futuro incierto y lejano. Vuelvo a acomodar mi universo. Cuàl de todos es? Què cosa allì es real? Y mi problema es que vuelvo. Vuelvo a comprobar que pocos entienden. Vuelvo a creer que pocos son capaces de crucificar el "yo" para tomarse la molestia de "entender" que hay de este lado. Vuelvo a ver còmo somos ràpidos para juzgar, sentenciar y quemar las actas. Vuelvo a pedir perdòn. A pedir razòn. A pedir que entiendas. A pedir que actùes. Que te muestres. Vuelvo a desafiarte. Porque ya no sè còmo pedirte. Vuelvo a vivir las añejas experiencias. Los molestos desplantes. Vuelvo a la sanidad. Vuelvo a la colitis ulcerosa. Vuelvo al hospital y otra vez no hay nadie. Vuelvo a sentir el vacìo y la soledad. A llenarme de todos y de nada. Vuelvo para que brille el Sol de Justicia. Vuelvo. Curiosamente me toca vivir al menos dos veces las mismas cosas. Vuelvo a las mismas verdades y certezas. Vuelvo a los blancos pasillos. Vuelvo a decir que no hay nadie. Y vuelvo a enojarme. Vuelvo allì, para que allguien me cure una parte. La que se vè, la que sangra y tiene diagnòstico de "urgente". Vuelvo a poner excusas. Vuelvo para ver a mi Doctor. A los mismos enfermeros. Para darme cuenta que esto no es un juego. Solo cambiaron los pacientes, los horarios y nada màs. La cura es siempre la misma. Vuelvo a ella. Vuelvo a necesitarte aunque sè que soy yo quien escapa. Vuelvo a escribir, como meses atràs. Es la prueba de que siempre vuelvo.